Lesiones

Es difícil evitar alguna lesión en tu etapa como runner, sobre todo en el mundo del corredor popular en el que los planes de entrenamiento online (Genéricos) nos invitan a hacer experimentos con nuestro cuerpo.

Sin embargo, puedes reducir los RIESGOS en gran medida si cumples ciertas premisas.

– Equilibrio. Deberás perseguir tus marcas hasta un punto, pasado el cual deberás decidir abortar la misión, descansar y recuperarte para volver más fuerte y conseguirlo. Los planes programados representan un gran peligro, ya que nos hacen creer que hay que cumplirlos a rajatabla incluso cuando estamos al borde de la lesión.

– Escuchar y percibir. Este será el primer paso de calidad como corredor. Deberemos estar muy atentos a lo que nos dice nuestro cuerpo. Este siempre será sincero con nosotros y nos dirá cuando debemos parar. Nuestra cabeza, metas y emociones subjetivas son las enemigas, hay que conseguir mantenerlas a raya.

– Taller Mecánico. Nuestro organismo es una máquina perfecta; no lo dudéis. Pero si la ponemos a prueba y la llevamos al límite, nos avisará para que paremos. Los avisos serán de formas diversas (Calambres, contracturas, fatiga, apatía por entrenar, sensación de malestar, falta de fuerza…) y si no les hacemos caso, la forma de pararnos será la propia lesión (El cuerpo es muy sabio; si te quiere parar, te frena en seco). Por ello siempre es bueno pasar por el taller (Fisioterapeuta, osteópata, médico…) de forma periódica. De esta forma iremos poniendo a punto el cuerpo para los desafíos que le presentamos.

– Nutrición. Es bien sabido que nuestro cuerpo necesita combustible para realizar todas sus funciones. Cuanto mejor sea el combustible, mejor funcionara y en consecuencia estaremos expuestos a menos lesiones asociadas.

– Consulta con el Experto. Es el punto más importante para no lesionarlos. Si lo que buscamos es mejorar nuestro estado de forma; la mejor forma siempre será acudir a un preparador físico para que con su experiencia y conocimiento nos prepare un plan de puesta en forma adaptado a nuestro organismo, lesiones antiguas y nivel deportivo. De esta forma alcanzaremos nuestros objetivos minimizando los riesgos al máximo